Una mañana muy buena para hacer bicicleta de montaña, aparcamos un poco la de carretera y nos juntamos un grupo gente del club, para hacer una ruteja tranquila por las sierras de la casa Pía, así que con un ritmo constante y algún apretoncillo que otro cumplimos el recorrido estando en el pueblo de regreso a las 11:45, con tiempo para tomar una cerveza fresca y no perder la buenas costumbres.
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