martes, 19 de enero de 2010

LA VEREDA Y PUNTA AMOR


Una semana poco prometedora, con fuertes vientos y algunas lluvias que otras, se preveía el tener que aplazar la ruta para otro día, y sin embargo se nos presento un día de los mejores de este invierno, a las 8:00 de la mañana salíamos para el destino Casalgordo, un pueblecito que casi no aparece en el mapa, creo que no tiene ni bares, vamos un cuadro de pueblo, desde allí salimos dirección para la Vereda del Fraile, no sin antes pasar por el calvario de la mañana, unos caminos llenos de barro del que no te mancha mucho, pero las bicis se clavaban y no andabas na siquiera, luego y a la llegada a la Vereda nos encontramos y el que allá venido alguna vez lo sabe, la casa de las vacas, la cual estaba que ni te cuento, pero después de esto el terreno se mejoro al cien por cien y la Vereda estaba para disfrutarla a tope, a la salida de la Vereda y tomando un camino que nos salia a la izquierda, iniciamos el ascenso a punta amor, un ascenso que como pongo en los datos de la ruta estaba en 1360, hay es na, una cuesta interminable con unos parajes de ensueño que cambiaban según nos acercábamos a la cima, cima que todavía tenia nieve de las ultimas nevada y que la niebla y las nueves que estaban a la misma altura no nos dejaron de contemplar el paisaje, que eso si allí arriba debería de verse media España, parando poco tiempo arriba, ya que hacia un poco frió, iniciamos el descenso, un descenso rápido y técnico, hasta llegar a una casa en una pradera en la cual abituallamos un poco antes de seguir el camino, volvimos a meternos en la Vereda del Fraile para hacerla esta vez al contrario, y creo que mucho mas divertida todavía, puntualizo que en un tramo había un repecho de un cibanto bastante complicado de subir, y que algún Valiente y no digo ni nombre ni apellidos, se quedo clavado en mitad de la estacada, esto me llevo a tomar la decisión de darle un pasote por entremedias de la maleza y llegar hasta arriba de dicho repecho sin vacilar,( el lo subió andando ) continuamos el camino y terminamos la vereda, nos encaminamos hacia Casalgordo y de postre tuvimos que navegar con las bicis por un rió para poder llegar a los coches ya que el camino había desparecido totalmente, bueno en resumen una ruta fantástica y completica, como seria que algún Valiente volvió durmiendo en el coche jejeje.

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